Un día como hoy…
El 23 de octubre 2017, fallecía
en nuestra ciudad el ex diputado provincial por el justicialismo, Ramiro
Vargas, contando en su haber con un interesante rosario de obras.
Por Eduardo Agüero Mielhuerry
Ramiro Hernando Vargas nació en Lomas de Zamora el 30 de junio de 1939. Sus padres fueron Lucy Etel García y Evaristo Vargas; tuvo tres hermanos: Martha, Raúl y Diego.
Cuando era pequeño toda su
familia se trasladó a Azul. Concurrió a la Escuela Nº 17
“Bartolomé Mitre” y al Colegio Nacional “Esteban Echeverría”. Desde muy joven
se despertó en él un gran interés por la política, la historia, las letras y
los árboles. Uno de sus grandes “modelos a seguir” fue su madre, Lucy Etel, que
colaboraba para la revista “PAN”, que generosa y laboriosamente
conducía doña Emilia Betinelli viuda de López Claro.
Ramiro alentó las prácticas
deportivas, siendo uno de los más activos dirigentes de la extinta entidad “Defensores de la Avenida Presidente Perón”
con nutrida actividad en el ciclismo que tenía desarrollo sobre la misma
avenida donde se efectuaban las competencias en el circuito que se formaba
alrededor de las ramblas existentes por entonces.
Junto a Antonio Morales Tejera,
fue director de la publicación “Los 90 de La Plata”, editada en
1972 para el aniversario de la capital bonaerense, en la que también participó
su madre, que como escritora y periodista fuera autora, por otra parte, de “Nuestra
Argentina, relato histórico”.
Formó su hogar con Haydée
María Yannuzzi, su gran amor y compañera de vida, con la que crió y
disfrutó de tres hijos: Juan Manuel, Alejandro Ramiro y Lucy
Soledad, y dos nietas: Clara e Inti.
Militante y dirigente del
justicialismo azuleño, marcó con su impronta el devenir del Partido, actuando
desde las bases mismas hasta abrazar con fuerza y solidaridad las necesidades
de la comunidad. Cuando comenzaba a culminar la oscura etapa de la Dictadura
Militar, formó parte de la “atípica” cena que se concretó en Azul el 18 de
junio de 1982 en “El boliche de
Oscar”, reunión de la que participaron dirigentes de todos los partidos
políticos como Oscar R. Costanza, Mario Carlos Laurini, Adalberto Sanfilippo,
Alberto N. Sarramone, Balbino Pedro Zubiri, María Elena Murguiondo (única
mujer), Gregorio Schuffer, Rodolfo Ruibal, Bernardo Rocca, Idilio Pedro
Giarola, César L. Martínez, Antonio Moisés Norte, Juan Atilio Barberena, Omar
Cordido, Rubén César De Paula, Aníbal R. Bocchio, Ricardo Némoz y Juan A.
Lagomarsino, entre otros. En el aire se sentía el retorno de la ansiada
Democracia…
Junto a su esposa editó “Guiazul”,
un extenso trabajo en dos tomos, “una
publicación que con forma de guía tuviera carácter de pequeña enciclopedia”,
recorriendo la historia y la dinámica de Azul por entonces.
En 1987 fue electo Diputado
Provincial, comenzando una intensa labor legislativa que lo potenciaría
como referente local y a través de la cual dejaría un importante legado de
obras.
El 6 de mayo de 1988, cuando se produjo la visita a
Azul del entonces gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Antonio
Cafiero, formó parte de la comitiva que recorrió la ciudad y participó
de los actos en los que el mandatario provincial entregó subsidios, anunció el
apoyo para la reapertura de la Curtiduría Azul, entregó escrituras del Barrio
Güemes, y visitó el complejo deportivo de Sportivo Piazza, el barrio Plaza
Oubiñas y la Expomiel ’88.
Finalizando la década, cuando la
inflación diezmaba a los argentinos, Vargas informó la puesta en funcionamiento
en Azul de tres centros de distribución de viandas con destino a chicos de cero
a seis años y mujeres embarazadas, implementados a través de su gestión. Los
lugares donde funcionaban fueron las capillas San Francisco y Santa Lucía y el
polideportivo de Sportivo Piazza. En aquella ocasión Vargas subrayó que: “Lo importante es que los chicos almuerzan
en su casa preservando el núcleo familiar”.
Después de mucho batallar, de
abrir canales de diálogo y lograr consensos en los distintos estamentos
estatales, el 23 de noviembre de 1991, señalando uno de los mayores logros de
su gestión legislativa, Ramiro H. Vargas formó parte del acto inaugural de las
28 viviendas del Barrio de Luz y Fuerza, ubicado entre la Avenida 25 de Mayo,
Moreno, Comisario Aldaz y calle Nº 5, construido por iniciativa del Sindicato
de Trabajadores de Luz y Fuerza de Azul. En alguna nota periodística se
rescataron las siguientes palabras: “Por
sobre todo queremos recalcar que, uno de los principales gestores de este
emprendimiento, es el diputado provincial Ramiro Vargas, quien nos representó y
nos abrió las puertas en el Instituto de la Vivienda”.
También debe contarse como un
hito en su labor legislativa la concreción del Jardín de Infantes Nº 917 (hoy
“Rosario Vera Peñaloza”), obra para
la cual fue donante de dos terrenos donde se iniciaron los trabajos de
edificación, en San Juan y 1º de Mayo. El edificio fue construido mediante el
sistema de “suelo-cemento”, programa
impulsado por al Comisión de Acción Social de la Cámara de Diputados de la
Provincia que justamente presidía Vargas.